Gwaihir, ¡mi nueva Honda CB500X!

La semana pasada, justamente cuando caía la última hoja del otoño, el 20 de junio, pude volver a casa arriba de una moto que me gustaba desde hace años: ¡esta hermosa Honda CB500X del año 2022! (En rojo, como era de esperarse).

Mi Honda CB500X junto a un campo en Batuco, Lampa.
Gwaihir recorriendo Batuco.

La moto tenía apenas 6.500 km en su odómetro y todavía tiene poco más de un año de garantía. (El dueño anterior incluso era observador de aves, jeje).

Lo primero que noté es lo suave que se siente en comparación a la Honda XR250 Tornado, al ser de dos cilindros no vibra tanto, con un motor de 471cc es muy veloz también, amortiguación fantástica y el asiento no es una tabla de planchar. El parabrisas llegó a mejorar enormemente mi vida, especialmente en la autopista.

Ayer, luego del temporal que trajo mucha lluvia y causó estragos en varias regiones de Chile, me tocó ir a censar piuquenes a Batuco. Como ya me ha tocado ir a censar luego de que llueva, sabía exactamente cómo estaría de embarrado el camino, lleno de charcos y ripio suelto. No pude instalarle los cubre puños ni las defensas de motor debido a las lluvias, por lo que iba muy angustiado de no botar la moto en este recorrido, pero había un factor que empeoraba las cosas y ya había leído de eso: los neumáticos Dunlop Trailmax Mixtour. Apenas toqué el camino de tierra, barro y pozas en realidad, los noté inseguros, no sentía el agarre y a ratos notaba que la rueda trasera se deslizaba hacia los lados. (Punto extra para la angustia: el camino era oscuridad absoluta).

Mi Honda CB500X con sus neumáticos de fábrica completamente embarrados.
La CB500X, a partir del 2019, trae de fábrica los Dunlop Trailmax Mixtour…
¡No aptos para el barro de Batuco!

Quedó bien embarrada en su primera aventura corta, afortunadamente sin caídas, aunque estuvo cerca un par de veces dando media vuelta en un barrial.

Mi Honda CB500X con sus tubos de escape embarrados.
La posición de los escapes, justo atrás de la rueda, no es lo mejor… Pero nada que una lavada no pueda arreglar.

Próximamente haré una suerte de review o retrospectiva de lo que fue mi periodo con la Honda XR250 Tornado, luego de 6 años y más de 50.000 km recorridos.

¡Espero que esta nueva moto me pueda llevar más lugares, seguir recorriendo y pajareando en el futuro!


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